Hoy tratamos una vivienda planteada sobre una superficie de hormigón, con una planta rectangular de doce por dieciséis rodeada de un gran terreno de 5.000 metros. Para disfrutar del exterior y al mismo tiempo disponer de cierta intimidad se instala una piel de cristal en dos de sus caras y paneles prefabricados en las otras dos. Un tiempo de ejecución brevísimo da lugar a una casa muy funcional, atractiva y muy bien distribuida que goza de una espléndida terraza contigua a la piscina naturalizada. Hoy conocemos con este proyecto la vertiente más inteligente de la arquitectura residencial.
El proyecto de arquitectura de esta vivienda, ubicada en las inmediaciones de Roses, está regido por la normativa local de la zona, bastante estricta con el tamaño máximo y la altura de las construcciones en función del tamaño y ubicación del terreno disponible.
El diseño de la vivienda disfruta de un pequeño jardín que permite colocar una piscina rectangular. La superficie de la construcción está formada por una gran placa de hormigón de unos 192 metros cuadrados que sustentan la vivienda entera. En cuanto al proyecto se busca aprovechar el espacio para compatibilizar la intimidad con el disfrute de las panorámicas y la comodidad. Para ello se plantea una distribución en planta que aprovecha parte de la base para su construcción. Una gran ventaja de este tipo de construcción semi-prefabricada es que su construcción puede realizarse muy rápidamente. Las columnas diagonales que sostienen la construcción proporcionan un refuerzo estructural al conjunto además de resultar muy estéticas.
Frontal en cristal y diseño de la terraza
En el diseño se trataba de aislar la casa de las vistas de los vecinos, para conseguirlo sin que el diseño interfiera con los objetivos principales que son la luz y la comodidad, se construyen dos caras opacas y otras dos totalmente abiertas al exterior. De esta forma se decide abrir la casa hacia el sur y hacia el oeste con sendas cristaleras de gran tamaño que comunican con la zona verde del jardín, ofreciendo unas magníficas vistas al paisaje cercano. La entrada de luz natural por la cara sur es muy generosa hasta el punto de que se hace necesario pensar en unos buenos estores en su interior para poder controlar la temperatura y la iluminación durante el día.
La fachada sur al mismo tiempo se extiende hacia la piscina creando una pequeña zona de estar exterior que hace las funciones de un porche. Para ello se ha retirado la fachada acristalada unos metros y se sustenta la estructura con unas columnas metálicas inclinadas que brindan a este lado del edificio un aspecto vanguardista muy sugerente. La fachada de cristal posee una forma libre cuya resolución supuso un reto técnicamente a la hora de elegir el material. El resultado ha sido una gran terraza que domina la piscina.
Piscina con filtrado natural sin bomba
El segundo reto técnico para esta construcción fue la piscina situada a los pies de la casa, mediante un sistema de filtro naturalizado que hace innecesario el uso de una bomba eléctrica para la circulación. Para ello se utilizan unos filtros orgánicos naturales que son suficientes para mantener el agua en unos niveles de limpieza y claridad suficientes para su disfrute. Se trata de una nueva forma de mantener la pureza del agua mediante plantas y arenas específicas que hacen innecesario el uso de una bomba convencional. La escalera de acceso a la piscina es de madera marina.
El paisajismo del jardín se ha realizado con arbustos de origen local así como césped de la zona que da verdor y permite disfrutar del sol junto a la piscina. Los pocos muebles que se aprecian en la terraza quedan circunscritos a lo necesario para la época estival.
Nada más cruzar la puerta desde el jardín al interior de la vivienda, se han colocado las funciones más sociales de la casa: salón, comedor, cocina. Y para la realización de convites se ha dispuesto de un gran espacio en el ángulo norte y este de la construcción.
El garaje cubierto
Un divertido voladizo sobre el jardín que coincide con la zona de acceso hace las funciones de espacio para guardar el coche y al mismo tiempo alberga la escalera de acceso a la planta principal y puede servir como terraza auxiliar. Tres usos para un mismo elemento que muestra la capacidad de trabajo de la arquitectura residencial bien aplicada.
Todos los elementos usados en la construcción siguen las pautas de sostenibilidad que impone el sentido común y la normativa local. Una serie de filtros y desagües ubicados en la parte posterior de la casa permiten canalizar el agua del techo siendo conducida hasta el subsuelo sin perjuicio de la vivienda. Se han cubierto los paneles del edificio mediante membranas sintéticas que permiten regular la temperatura. En el techo se ha colocado claraboyas en blanco mientras que las fachadas están recubiertas de PVC con teflón. Los materiales de aislamiento son, asimismo, de alta calidad para asegurar la impermeabilización y regulación de temperatura interior durante las diferentes épocas de año. Además se han colocado elementos de calentamiento naturales que procuran un bajo consumo de energía.