¿Te preocupa la zona de entrada de tu casa? Mucha gente opina que son espacios perdidos, pero no pueden estar más equivocados. Por eso hoy te hemos preparado este post donde podrás leer ingeniosas ideas para sacarle el máximo partido a tu recibidor y zonas de paso.
Da igual que tu casa sea grande o pequeña, siempre puedes crear una entrada cuidada y atractiva. Piensa que es lo primero que ven tus invitados así que presta atención a los detalles y déjales con la boca abierta por tu saber hacer y delicadeza.
Los básicos del recibidor
Es cierto que hay muchos tipos de recibidores dependiendo, fundamentalmente, del tamaño de la casa. Busca el tuyo y lee con atención. No obstante, lo primero que tenemos que aclarar son los muebles básicos de todo recibidor.
No puedes quedarte sin una superficie para dejar llaves, cartas o con vacía bolsillos. Tampoco puede faltar un perchero para dejar la ropa de calle y un espejo para comprobar el look. Algo que está muy de moda son las pizarras para dejar notas importantes que no debes olvidar antes de salir de casa. Imprescindibles los paragüeros para no manchar la casa cada vez que llueva. Por último, una buena lámpara que se adapte al tipo de entrada.
1- Recibidores pequeños
Es decir, un pequeño espacio cerrado que comunica el resto de la casa con la puerta de entrada. Aquí lo importante es saber concentrar en este pequeño espacio todo lo necesario, sin renunciar al diseño y a la decoración cuidada pero potenciando también el aspecto práctico.
En espacios pequeños tienes que optar por muebles ligeros y en tonos claros que dan más sensación de ligereza. Por ejemplo, una consola de pared (más tipo balda) o una mesa auxiliar en cristal. Si necesitas un poco de espacio para almacenar puedes colocar una cesta debajo de la consola. Así también puedes darle un toque chic.
Para la ropa, un perchero de pared, más o menos grande según los miembros que seáis en casa. A esto le podéis añadir un organizador donde dejar las cartas o llaves.
Lo que es imprescindible en los recibidores pequeños son los espejos ya que necesitas dar más sensación de amplitud. Incluso tienes espejos-percheros como Tibs de Schönbuch. Aprovecha para colocar la luz justo enfrente del espejo para dar mayor sensación de espacio. En este caso opta por las lámparas de techo o apliques de pared.
Como ves las opciones para decorar la entrada son enormes aunque no cuentes con mucho espacio.
2- Recibidores grandes
En este caso, las opciones son infinitas y sólo tienes que elegir el estilo que necesitas. Por ejemplo, puedes optar por un toque minimalista con un aparador en color blanco donde guardar cosas, paragüeros, espejos, percheros…todo en tonos claros. Rompe este con un toque de color en la alfombra o pintando una de las paredes de la entrada en un color vivo. Este estilo es moderno y funcional.
Fuente: El Mueble
Otro estilo es el recibidor vestidor, crea un espacio con bancos, que pueden ser de obra donde sentarte a calzarte y descalzarte. Aprovecha todos los huecos y retranqueos de la pared para crear estanterías, armarios y zapateros. De esta forma ahorras mucho espacio en otras habitaciones y, además, das un uso fantástico al recibidor.
No te olvides de complementar esto con los otros imprescindibles como los percheros, paragüeros y lámparas. Aquí puedes permitiré contar con percheros de pie más elaborados y de diseño como los percheros-lámpara
3- Recibidores integrados o sin recibidor
En este caso, hay que exprimir al máximo la imaginación y saber detectar todas las posibilidades. Lo primero de todo es hacer un corte imaginario en la habitación para reservar una zona al recibidor. Puedes usar diversas tácticas como pintar las paredes de otro color o utilizar suelos distintos. Pero imaginemos que todo está pintado igual y que el suelo es el mismo.
El caso más frecuente es que la entrada dé directamente al salón. En estos casos el recibidor no suele contar con ventanas directas y es bastante oscuro y angosto. Por eso, una de nuestras metas es dejar fluir la luz. Por eso, no se va a cortar directamente con el resto de la estancia. Una de las soluciones más frecuentes es la de colocar un biombo que haga un pequeño corte. En este caso, opta por biombos plegables y con ventanales por donde pueda pasar la luz.
Fuente: Casa Diez
Otra opción es crear una estantería en cristal donde poner algunos libros, objetos decorativos, fotografías. Al ser de cristal puede fluir la luz por ambas habitaciones pero se corta en dos ambientes. En este caso presta atención y cuida el aspecto de la estantería porque será lo primero que se vea.
Por último, si tienes un espíritu más artístico, coloca en la divisoria imaginaria que has definido una tabla de madera pintada que cuelgue del techo, como en la imagen. ¡Incluso la puedes hacer tú! Esto lo puedes completar en la zona de abajo con una estantería donde puedes colocar libros o cestas de mimbre para guardar cosas, que están muy de moda.
Es básico saber optimizar el espacio y aprender a comprar muebles auxiliares apropiados como consolas estrechas que no ocupen mucho espacio, espejos amplios con poco marco que den luminosidad pero no recarguen el ambiente y lámparas de techo tipo plafón que liberen hueco.
Si te gusta renovar tu casa de vez en cuando puedes optar por una base de muebles en tonos crudos y añadir notas de color con alfombras, textiles y decoraciones que sean más fáciles de rotar.
¿Vas a poner en práctica nuestros consejos? Mándanos una foto con el resultado y lo publicaremos en el blog.
Hola,
me gustaría saber el precio de las lámparas que se ven en la primera foto. Gracias,
Antonio